¿Cómo se si necesito sacarme las cordales o muelas del juicio?
Antes de realizarte algún tipo de cirugía maxilofacial en Las Rozas, como la extracción de muelas del juicio, procura informarte muy bien de antemano para que puedas decidir si realmente es necesario. Este tipo de procedimiento no debe ser tomado a la ligera: acude siempre a los mejores especialistas e investiga en profundidad primero. A continuación, una serie de datos sobre este servicio de salud y estética dental en Las Rozas y el mundo.
Curiosidades sobre el nombre de las cordales
El coloquial que hace referencia al juicio no es el único nombre que tiene esta muela (ni el más empleado por dentistas y otros profesionales de este ramo). ¿Conoces otros de sus apelativos? ¿Sabes a qué se debe el más común de sus seudónimos? Sigue leyendo, aquí te lo contamos.
- ¿Por qué esta muela ostenta el calificativo de juiciosa? Pudieras pensar que el dolor que causa hace que cualquiera pierda el juicio. Pero, no se trata de eso, lleva ese nombre porque las edades promedio de erupción son entre los 17 y los 21 años de edad. O sea, salen cuando las personas ya tienen juicio.
- ¿Tiene otros nombres? Claro que sí. Los dentistas, por ejemplo, prefieren llamarle cordal, como lo hacen muchos otros países. También se le conoce como tercer molar, apelativo que no demanda mayor explicación.
¿Lo más importante que debes saber sobre las cordales?
Hay todo tipo de especulaciones sobre la naturaleza y utilidad de estos molares. Es hora de despejar las dudas.
- ¿Qué son? Como bien lo dice uno de sus nombres, es el tercer molar y se encuentra en el extremo interior de la boca, tanto en la dentición de arriba como la abajo.
- ¿Para qué sirven? Pues, como todos los dientes, los terceros molares sirven para masticar. En etapas más tempranas de la evolución del ser humano, llegaban a cuadruplicar el tamaño que tienen en la actualidad. Significa que siempre que no se dediquen exclusivamente a molestarte, serán útiles para la masticación.
- ¿Pueden causar problema? Tras millones de cambios antropológicos, los ingredientes principales de la dieta de la persona promedio, cada día dista más que la de aquellos antepasados con enormes cordales. Es por ello que su tamaño ha disminuido, que tardan más en salir (o incluso no salen) y que causan problemas. Es común que se queden atrapadas bajo la encía o que salgan en ángulos incómodos, entre otros.
¿Señales de que es hora de quitarlas?
Por ti mismo podrás detectar varias de estas señales, pero no debes asumir que basta con la autoevaluación. Debes acudir a un dentista que pueda vigilar el comportamiento de esas muelas, es él quien está calificado para percibir y predecir cualquier inconveniente. Estos son algunos de los criterios que harán que el odontólogo indique la extracción de uno o más terceros molares.
- No tienen suficiente espacio.
- Están incrustadas o atrapadas en tu mandíbula o bajo la encía.
- Están en posición incorrecta.
- Cordales parcialmente expuestos que permiten la acumulación de comida y por consiguiente bacterias.
- Formación de quistes en el molar o cerca de él, además de afectar la propia pieza dental, puede afectar a las adyacentes.
Ventajas y desventajas de la extracción de cordales
La ventaja de extraerlas es importante y obvia: detienes o evitas todos los inconvenientes antes esbozados. Pero ¿conoces las desventajas?
- Dolor.
- Hinchazón y sangrado.
- Hematomas.
- Posibles infecciones y supuración.
Aunque es una cirugía menor, la extracción de cordales requiere reposo y cuidados para alcanzar la recuperación. No te dejes desalentar por las molestias o desventajas sobre las que has leído o escuchado. No es una ley que haya dolor o infecciones. Los doctores harán lo necesario para prevenirlo y controlarlo.